domingo, 11 de marzo de 2012

Industrialización con intervención gubernamental

Edwin Rolando García Caal

El Estado siempre ha evaluado los posibles beneficios de desarrollar políticas industriales. Ya sea bajo la perspectiva de garantizar la competitividad, ya sea porque pretende garantizar la provisión de bienes para todos los estratos de la sociedad o bien porque pretende corregir las fallas de mercado.  En este último objetivo, la teoría económica establece que en aquellos mercados en donde prevalecen los monopolios y los oligopolios, la cantidad de bienes suministrados es menor que en aquellos mercados en donde existe un contexto competitivo. Especifiquemos este ámbito.

El tema de las economías a escala se considera una falla de mercado. Para los analistas económicos es bien sabido que en cualquier actividad industrial a mayor producción menores costos. Esto es lo que se denomina economías a escala. El orígen de las economías a escala se da como resultado de mantener permenantes en el corto plazo, los costos fijos de la actividad. El tema en la industria es importante debido a que los costos fijos de la actividad tienen una importante participación en la composición orgánica del capital, sobre todo para la adquisición de maquinaria y equipo. También es importante recordar que la capacidad instalada de la industria no inicia con la producción de nivel máximo hasta que se dan ciertas condiciones de la demanda. En palabras simples, bajo el supuesto de que una actividad industrial tiene un costo fijo de 100,000 producir 100,000 unidades asigna a cada unidad producida un costo fijo de 1. Cuando la industria alcanza la capacidad de producir 200,000 unidades su costo fijo distribuido dentro de estas unidades se reduce a 0.5 lo que permite señalar una economía de 0.5 por unidad producida en la segunda escala de producción. Con una producción a mayor escala, el costo fijo por unidad producida tiende a ser cada vez menor. El nombre específico para las economías así obtenidas es “economías estáticas a escala”.

Bajo la perspectiva de este análisis, para una industria es importante el volumen de producción. Esto ha dado como resultado grandes capacidades instaladas y a su vez grandes costos fijos de entrada, sin embargo, el incremento de la producción también garantiza la existencia de una escala de operación con costos medios decrecientes. Horstmann y Markusen (1986) y Schlie (1986) señalan que las economías estáticas de escala son una falla de mercado ya que, al necesitar de grandes inversiones para iniciar la producción, son muy pocas las firmas capaces de entrar en el mercado. Esto puede considerarse con propiedad si se toma como ejemplo la fabricación de cemento en Guatemala. La inversión necesaria para competir con la industria que domina el mercado es tan grande que durante años se ha mantenido en situación de monopolio. Es decir, existe una escala de operación mínima para alcanzar el precio de mercado de dichos productos, lo que para cualquier industria nueva es muy difícil de alcanzar.

La situación de monopolio acarrea tras de sí dos desventajas para el bienestar social. En primer lugar, cuando la industria no tiene competencia no está obligada a encontrar el punto óptimo técnico en donde los costos medios igualen a los costos marginales en el precio de mercado. Este punto en situación de competencia es importante porque apartir de allí se determina el nivel de producción que posibilita la máxima ganancia. Debido a que no tiene competencia la industria del monopolio puede darse el lujo de establecer el precio de mercado en cualquier nivel de producción. Es decir, la industria puede unilateralmente establecer el monto de su ganancia. Tal posición reduce el bienestar social porque el conglomerado sacrifica parte de su renta (que podría estar destinada a otros usos) para adquirir el bien industrial a un precio mayor que el establecido técnicamente. La otra desventaja para el bienestar social se dá en el ámbito de la calidad. A sabiendas de que no existe un producto con el cual se pueda comparar la calidad del bien industrial en situación de monopolio, la firma que ostenta el monopolio tiene poco interés en la mejora constante de la calidad y por lo tanto el bienestar social se ve mermado.

Los autores citados analizan la necesaria intervención del Estado para corregir las economías estáticas a escala. La primera recomendación es otorgar un subsidio a la entrada si el excedente del consumidor es mayor a las pérdidas operativas de la industria monopolística que se está interviniendo.  La segunda recomendación es evaluar que dicho subsidio sólo es posible si provoca un efecto negativo en la ganancia de la firma monopolística.

Existen otras economías a escala que dependen de la curva de aprendizaje (Alchian, 1963; Zimmerman, 1982 y Trajtenberg, 1989). Este punto explica el incremento de los costos cuando la experiencia es mínima y la reducción de los costos cuando la experiencia ya es mayor. Los costos de producción son elevados al principio de la actividad porque el derroche de recursos es inevitable, en tanto se calculan los tiempos óptimos y se reducen los residuos. La experiencia acumulada permite declinar rápidamente los costos medios a pesar de no incrementar la cantidad producida. Estas economías son llamadas “economías dinámicas a escala”.

En ese sentido los analistas de la intervención del Estado aconsejan otorgar un subsidio a la entrada pero sólo mientras dure la fase de aprendizaje, siempre que el excedente del consumidor sea mayor que las pérdidas operativas privadas debido a esa entrada. Esto no es necesario en situación de competencia debido a que el ingreso de más de una firma reduce el volumen de ventas de las existentes y la velocidad con la cual adquieren experiencia y por lo tanto se reducen los beneficios asociados a las economías dinámicas a escala.

En ambos casos, Brander y Spencer, 1985; Baldwin y Krugman, 1987 y Helpman y krugman, 1989, recomiendan que el Gobierno se debe comprometer a apoyar a las firmas locales en su deseo de entrar a competir con las firmas monopolicas rivales, sobre todo si estas son extranjeras. 

Para ampliar y comentar:

Es conveniente la intervención del Estado para propiciar el ingreso de nuevas firmas a un mercado de competencia monopolística? Por qué se dice que cualquier tipo de intervención del Estado sólo reduce el bienestar social?

Documentos consultados: Kosacoff y Ramos, 1999. El debate sobre política industrial. CEPAL.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Profesor, porque si las politicas de Estado encaminadas a erradicar las fallas de mercado buscan un mejor desarrollo de la competencia de productos y calidades de los mismos, teoricamente deberian de generar mayor bienestar social, nos damos cuenta de que es todo lo contrario puesto que mientras mas interviene el Estado y sus politicas mayor es evidente la desigualdad social