jueves, 17 de octubre de 2013

Marco legal de la educación superior en Guatemala

Edwin Rolando García Caal, et. al. (2013).
 
Los artículos de la sección V del Capítulo II del Título II de la Constitución Política de la República de Guatemala conforman el marco legal fundamental de la Educación Superior, tanto estatal como privada en el país. Con estos artículos se vinculan las demás leyes, reglamentos y estatutos que rigen la gestión de la Educación Superior de los guatemaltecos (Pecher, 2002).
 
Según la Constitución Política de la República de Guatemala, son funciones de la Educación Superior la formación profesional, la divulgación de la cultura, la práctica de la investigación y la cooperación al estudio, así como coadyuvar a la solución de los problemas nacionales (Art. 82 y 85). En materia de educación superior pública, la Constitución no establece la posibilidad de otra Universidad Estatal de acuerdo con lo que preceptúa el Artículo 82. En ese sentido la Constitución reconoce la autonomía de la Universidad de San Carlos de Guatemala, por lo que esta, para su administración se fundamenta, además de la Carta Magna, en su Ley Orgánica, sus estatutos y los reglamentos que emita para lograr sus objetivos. A la fecha cuenta con 27 reglamentos y una norma (USAC, 2009). Las universidades privadas en lugar de autonomía gozan de independencia. En este caso la independencia debe ser entendida como la libertad para crear sus facultades e institutos así como para desarrollar sus actividades académicas y docentes (Art. 85). Estas universidades se apoyarán normativamente en la Ley de universidades privadas y en el Reglamento Interno del Consejo de la Enseñanza Privada Superior (CEPS, 2013).
 
Por tener el carácter de única universidad estatal, gran parte de la normativa legal se centra en los deberes y obligaciones de la Universidad de San Carlos de Guatemala, en ese sentido este artículo utilizará un espacio significativo para presentar al público la historia de dicha universidad.
 
La Universidad de San Carlos de Guatemala fue fundada el 31 de enero de 1676  por real cédula del rey Carlos II, en esa fecha era la cuarta universidad fundada en América durante la época colonial. Años más tarde en 1687 logró categoría internacional al ser declarada pontificia, por la bula del papa Inocencio XI, el 18 de junio de 1687. Desde sus inicios, las cátedras que se impartían eran Derecho civil y canónico, medicina, filosofía y teología. Poco antes de 1687 se incluyó dentro del pensum la docencia de lenguas indígenas. Durante la época colonial cruzaron sus aulas más de cinco mil estudiantes y además de las doctrinas escolásticas se enseñaron la filosofía moderna y el pensamiento de los científicos ingleses y franceses del siglo XVIII, sus puertas estuvieron abiertas a todos; criollos, españoles e indígenas, ya que según se repasa, entre sus primeros graduados se encuentran nombres de indígenas y personas de extracción popular (Dirección de Docencia Universitaria, 2006).
 
Pero la universidad estuvo 200 años formando sacerdotes, juristas y médicos, con algunas innovaciones y reformas promovidas por Liendo y Goicoechea y el Dr. Mariano Gálvez. No es sino hasta la reforma liberal presidida por Miguel García Granados y Justo Rufino Barrios, que se reorganizó la Educación Superior y por ende el pensum universitario de la USAC cambió. En junio de 1875 fue emitida la Ley Orgánica de la Enseñanza Superior, norma en la que se instituía la creación de las Escuelas Facultativas con reglamentación específica. La primera Facultad que se organizó fue la de Derecho o Jurisprudencia y Ciencias Políticas y Sociales, le siguió la Facultad de Medicina en 1880, la cual ocupó el edificio Mayor de los Paulinos y las instalaciones del Museo de Zoología, el Jardín Botánico, el Gabinete de Física, los laboratorios y el Anfiteatro, entre otros. También desde 1883 empezó a funcionar la Escuela Anexa de Comadronas que no existía con anterioridad (Cazali, 1997, 2001; Orellana, 2007).
 
Entre las escuelas facultativas de la universidad estuvo La Escuela Politécnica, encargada de la formación en ingeniería. Nótese que en ese tiempo no tenía como objeto la formación de militares, sino de ingenieros especializados en las distintas ramas que el país necesitaba. La Facultad de Literatura y Filosofía, que según su plan debía recoger en su seno las inquietudes humanísticas e impulsar el estudio de las nuevas corrientes de filosofía, por diversas razones no llegó a organizarse plenamente. En 1885 funcionaban las facultades de Derecho y Notariado, Medicina y Farmacia e Ingeniería. El ciclo escolar por el que se regían las facultades iniciaba en enero y concluía en octubre (Cazali, 1997, 2001; Orellana, 2007). Los frutos de la Ley de Enseñanza Superior de 1875 no sólo llegaron a la ciudad capital, también se extendieron a Quetzaltenango, ya que el 20 de noviembre de 1876, se instituye la Universidad de Ciencias Jurídicas de Occidente, por medio del Decreto Gubernativo No. 167… (leer artículo completo).





Cuentas Nacionales de Salud en Guatemala



Edwin Rolando García Caal

Ya están disponibles las Cuentas Nacionales de Salud 1995-2013


Mejorar la toma de decisiones y la evaluación de los planes nacionales para un replanteamiento de los objetivos de largo plazo en materia de salud, sólo podrá desarrollarse a través de una nueva práctica analítica, que acerque al sistema de salud a enfrentar nuevas estrategias en la coyuntura actual de los países, de manera que el dato estadístico se traduzca en decisiones financieras que estimulen al sistema de salud y permitan el desarrollo de nuevas tecnologías para la atención de las personas. Esto podría facilitarse con la implementación de un Sistema de Cuentas Nacionales de Salud.

Bajo la concepción de la Organización Mundial de la Salud (OMS) "Un sistema de salud engloba a todas las organizaciones, instituciones y recursos cuyo principal objetivo es llevar a cabo actividades encaminadas a mejorar la salud (OMS, 2011)". Para el caso de Guatemala esta definición debe también incluir que a nivel local (en comunidades y aldeas), existen personas individuales que sin utilizar las formalidades de la medicina occidental también prestan servicios de salud con y sin remuneración.


En ese sentido el sistema de salud de Guatemala está conformado por todas las organizaciones Gubernamentales, privadas, sin fines de lucro y comunitarias (de medicina tradicional y del sector informal) que prestan servicios de salud a la población con el objetivo de atender las áreas urbanas y rurales que demandan atención.


Haciendo agrupaciones teóricas se puede decir que en Guatemala el sistema de salud está conformado por 3 tipos de subsistemas que se definen a continuación:


El Subsistema público de prestación de servicios de salud; el mismo está conformado por el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social –IGGS-, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social –MSPAS- y las Entidades Sin Fines de Lucro que reciben fondos del Gobierno a través del MSPAS para la prestación de servicios de salud. El IGGS cuenta con 128 unidades médicas que incluyen: hospitales, policlínicas, consultorios, direcciones departamentales, unidades de adscripción, centros integrales de salud mental, unidades de consulta externa de enfermedades y centros de atención integral para pensionados. (IGSS, 2009). El MSPAS reporta los siguientes servicios de salud: 179 centros de atención permanente, 110 centros de salud, 40 centros nacionales de pacientes ambulatorios, 5 centros de atención materno infantil, 4,618 centros comunitarios de salud o puestos de convergencia, 774 puestos de salud, 65 puestos de salud fortalecidos y 245 puestos de salud fortificados. (SIAS, 2011). Otras instituciones del Estado que reciben fondos a través del presupuesto general de ingresos y egresos de la Nación. Entre estas pueden mencionarse el Ministerio de Gobernación, El Ministerio de la Defensa, el Ministerio de Educación, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación, el Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda, Secretarías y otras dependencias del Ejecutivo y transferencias directas de las Obligaciones del Estado a Cargo del Tesoro (DSE/UPE, 2010).

El Subsistema privado de prestación de servicios de salud; este está conformado por organizaciones no lucrativas y lucrativas que prestan servicios de salud. En las entidades lucrativas tenemos hospitales, clínicas de medicina general y de especialidades, odontólogos, laboratorios, etc. En el año 2008 se muestra el registro total de hospitales, sanatorios y casas de salud privados registrados como sigue: 84 hospitales privados, 29 hospitales privados de día, 172 sanatorios, 24 casas de salud, para un total de 309 servicios de salud privados. En las entidades no lucrativas están las fundaciones, asociaciones, y organizaciones que prestan servicios de salud a bajo costo para su mantenimiento, están también realizan rifas y tele maratones para agenciarse de fondos, asimismo subsisten con donaciones de las agencias internacionales de cooperación internacional (GIZ, AECID, AID, JICA, Cooperación Sueca, DISOP de Bélgica, entre otros).

El Subsistema comunitario de prestación de servicios de salud; este subsistema está conformado por el modelo de medicina indígena maya: comadronas, hueseros, sobadores, medicina natural tradicional y otros sistemas alternativos (acupuntura china, sanación divina, etc.). Algunos datos de la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida –ENCOVI- (INE, 2006) indican que gran proporción de la población pobre y extremadamente pobre utiliza algún tipo de asistencia comunitaria de salud. La ENCOVI señala que un 48% de los menores de 6 años indígenas aún reciben atención de salud en su casa y un 47.8% de los menores de 6 años del total de habitantes del área rural, son atendidos bajo estas condiciones (INE, 2006). Asimismo, las comadronas o parteras atendieron un 39.5% del total de partos en el país durante la encuesta (INE, 2006). Finalmente se puede señalar que un 78.3% de todas las mujeres en edad fértil reportadas como pobres, fueron atendidas por comadronas y un 21.7% de las no pobres también fueron atendidas por comadronas durante el periodo de la encuesta (INE, 2006).

Respecto a la inclusión del subsistema de salud comunitaria un estudio crítico del sistema de salud de la Universidad Rafael Landívar establece la importancia de reconocer los servicios de salud comunitarios tradicionales y por ende apoyarlo en su organización y desarrollo (Cotton, 2004). Según el autor del estudio, "El sistema de medicina tradicional comunitaria ha sobrevivido… a pesar de que ha sido ignorado y muy poco tomado en cuenta desde la cultura occidental…" (Leer documento completo). Estado de las Cuentas Nacionales de Salud de Guatemala 2008.